son las 12 35 de la mañana, me encuentro en el salón escuchando de fondo una de esas series fantásticas que están de moda y entre el sopor del sueño me llega a la mente mas que una pesadilla un sueño que me relaja en las pesadillas habituales.
me encuentro en el mar embravecido de mis propios problemas y alguien desde un barquito me lanza un salvavidas hecho con alambre de espino, pero como es algo a lo que asirse para salir un rato de la marea de mi propia tormenta como es lógico me agarro a el y subo al barquito.
tras secarme un poco darle alimento a mi mente con otras cosas t y terminar de digerir lo que mi mente se ha comido , me tiro de cabeza otra vez al mar de mis pesadillas de mi marea de mi temporal para ver si al final consiguo aprender a nadar o al final me ahogo.
como siempre ocurre con la tv llego la publicidad y como es habitual esta suena a un volumen mas alto que las series o películas que emiten, al final me desperté de mi somnolenciaa.
no hace demasiado tiempo estuve en la consulta de una profesional de las ideas y tratando de las formas de ayudar a quitar algunos frenos mentales, le interpele por lo contraproducente que podía ser en algunos ámbitos perder el miedo y la vergüenza siendo replicado por esta con la pregunta, y cual es el problema.
yo preferí seguir con mis frenos mentales que no me van mal del todo, pero hay que saber que no debemos de quitar los tacos de madera que impiden que la apisonadora se mantenga en su lugar en lo mas alto de esa loma con una caída descendente de varios kilómetros de distancia y que en la base de dicha loma hay una pequeña csilla de madera que no aguantara el embite de la apisonadora.
en fin que me entra sueño de nuevo asi que ya volveré a corregir esto en otro rato y lo publicare entre sueño y pesadilla.
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